Más allá de Santiago

Desde finales del siglo XIV, los peregrinos a Santiago de Compostela se alegran de continuar su viaje hasta la costa:
- En Padrón, les mostraron el lugar donde Santiago había predicado, el lugar donde había desembarcado la barca que transportaba su cuerpo y la roca que se había ablandado bajo el peso de su cuerpo.
- en el cabo Finisterre, les mostraron las huellas de Cristo, el asiento excavado en la roca donde se dice que se sentaron la Virgen María, San Juan, Santiago y San Pedro, y la tumba de San Guillermo (Saint-Guilhem-du-Désert).
- En Muxía, se mostró a los peregrinos la barca de piedra en la que llegó la Virgen, y cuyo mástil, de unos 25 m de largo, solo podían mover los peregrinos libres de pecado. (El santuario de Muxía se incendió en la Nochebuena de 2013, pero fue reconstruido y reabierto en 2016).